martes, 12 de marzo de 2019
El equipo de Pep Guardiola goleó por 7-0 para coronar un
10-2 en el global y conseguir su clasificación sin apuros.
Manchester City justificó las enormes diferencias
futbolísticas con Schalke 04, equipo que figura debajo de la mitad de la tabla
en la Bundesliga, al aplastarlo sin discusiones en su serie de octavos de
final: victoria por 7-0 que en el global quedó traducida con un 10-2.
Si bien en la ida en Alemania se había decidido de manera
ajustada (3-2), los dirigidos por Pep Guardiola fueron una máquina y dominaron
de principio a fin en el Etihad Stadium para resolver su eliminatoria sin
discusiones.
Los Citizens dominaron desde la abrumadora posesión de balón
y consiguieron la apertura del marcador a los 34 minutos de juego: Ilkay
Gündogan habilitó a Bernardo Silva y a éste un defensor se le fue encima para
obligar a la sanción del penal. Con sangre fría, Sergo Agüero picó el balón y
festejó el primero.
El argentino volvió a aparecer a los 37' después de recibir
un taco de Raheem Sterling ante una defensa débil, sin oposición para el
asistente ni para el delantero, que firmó su doblete.
Leroy Sané terminó por encaminar la clasificación con una
aparición solitaria por izquierda cerca del cierre de la primera mitad para
definir sin problemas.
La segunda parte sirvió para que Sterling, a los 10 minutos,
anotara su cuarto gol en cuatro días después de su hat-trick por Premier League
del sábado ante Watford.
Bernardo Silva, Phil Foden y Gabriel Jesus terminaron por
humillar a un rival que no amenazó en ningún momento y los de Guardiola
ratificaron su condición de favorito en la competición con cifras aplastantes.