miércoles, 13 de marzo de 2019
El equipo de Klopp fue efectivo de visitante y ganó 3-1 en
Alemania por un doblete de Mané y el restante de Van Dijk. No alcanzó en los
bávaros el tanto en contra de Matip.
Liverpool jugó en gran nivel y se impuso en la revancha ante
Bayern Munich, en el Allianza Arena, con un contundente 3-1 que lo mete en los
cuartos de final de la Champions League.
El empate en cero en la ida obligó a ambos a salir a buscar
la victoria y el primero que tuvo la gran ocasión fue el equipo de Jurgen
Klopp. No falló. Sadio Mané encaró al área, aprovechó una apurada salida de
Manuel Neuer y con un rodeo desconcertó al arquero alemán para picarsela por
encima. Golazo al minuto 26 en Alemania.
El apuro del Bayern por ir a buscar el empate casi despierta
el 2-0, pero Neuer se redimió y sacó un buen disparo cerrado de Andrew
Robertson. Los bávaros consiguieron igualar en una escapada de Serge Gnabry,
que buscó en un remate cruzado y encontró la pierna de Joel Matip para mandarla
dentro de su propio arco.
Robert Lewandowsi pudo haber dejado al local en ventaja y
con la clasificación antes del complemento, aunque falló en la decisión de
tocar con suavidad frente al brasileño Alisson y el balón se fue despacio,
pegado al palo derecho del guardamenta.
Todo se terminó en Munich al minuto 69. Virgil Van Dijk se elevó
más que todos tras un córner desde la derecha y anotó el 2-1. Otra vez, el
Bayern estaba obligado a marcar dos veces para pasar de ronda. Los Reds se
cerraron bien y aprovecharon la desesperación del rival.
A los 84´, Mohamed Salah esperó el momento justo para enviar
un centro pasado al segundo palo y que llevó a Mane a convertir de cabeza, su
doblete, que finiquitó la serie. Liverpool dio un paso firme fuera de casa para
meterse en cuartos de Champions.