jueves, 11 de abril de 2019
Boca derrotó por 4 a 0 a Jorge Wilstermann en la Bombonera por Copa Libertadores. Emanuel Reynoso, Darío Benedetto (de penal), Mauro Zarate y Alex Silva (en contra) marcaron los goles del local.
Boca se recuperó de la goleada en Brasil con otra más abultada a su favor contra el rival más accesible del grupo, se volvió a acomodar en la tabla del Grupo G de Copa y ganó en tranquilidad, algo minada tras el resultado en Curitiba.
Hoy salió a la cancha con el mismo equipo que cayó ante Paranaense (Villa-Tévez-Reynoso), sin Zarate, que pide pista en base a goles.
El primer tiempo no le resultó tan sencillo al local. No por lo que ofrecía la visita, muy limitada y casi inofensiva, sino por lo que le costaba a Boca ponerse de cara al arco.
Casi al minuto, Tévez tuvo el gol pero definió mal por encima del arquero.
Tras eso, daba la sensación que el gol llegaría en cualquier momento pero fallaba en los últimos metros, con Reynoso y Tévez imprecisos.
Ni siquiera con un penal que el arquero Giménez le tapó a Benedetto pudo ponerse en ventaja.
Sin embargo, minutos después, Buffarini peleó una pelota que parecía perdida, ganó y tiró el centro para que Bebelo Reynoso ponga el 1 a 0 de cabeza, solo en el área chica.
Del equipo boliviano en ataque casi nada. Solo un gran tiro libre del Pochi Chávez que, entre Andrada y el travesaño salvaron a Boca y López sacó la pelota en la línea en el rebote.
La segunda parte del local fue mucho mejor. Más suelto, Reynoso empezó a encontrar más la pelota y más espacios, Tévez y Villa subieron el nivel y a Boca se le hizo todo más sencillo.
Otro penal cobrado (leve agarrón a Tévez) si fue cambiado por gol por Benedetto y el partido se acabó. El equipo boliviano desnudó todas sus falencias y solo observaba como el local se floreaba.
Faltando poco para el final, Zarate ingresó por Tévez y volvió a pedir pista. Primero con un lindo gol picándosela al arquero de afuera del área en una contra y luego generando el gol en contra de Silva (cabezazo que rebotó en el central) para cerrar la goleada.
4-0 final para recuperarse y dejar atrás el mal trago en Brasil. Ya sin Superliga, a la espera de lo que será la Copa de la Liga, Boca se volvió a acomodar en Libertadores.
