jueves, 11 de abril de 2019
El Canalla no pudo hacer pie en Brasil y ahora depende de un milagro para meterse en octavos. El Tricolor logró un 3-1 fundamental para seguir ilusionado con la clasificación.
Rosario Central sabía que se jugaba mucho de la clasificación a octavos de la Copa Libertadores en la complicada visita a Porto Alegre. Gremio no perdonó y ganó por 3-1 para prenderse en la lucha por el segundo boleto del Grupo H rumbo a la siguiente ronda, mientras que el Canalla comienza a despedirse.
Desde el arranque fue todo del Tricolor. Los dirigidos por Diego Cocca quisieron cerrarse en su campo para buscar los espacios, pero se vieron superados por un conjunto local que consiguió la apertura del marcador a la media hora de partido: Everton puso el balón al área y Jean Pyerre tocó de primera, a media altura, que dejó sin reacción al arquero Jeremías Ledesma.
En el complemento, Leonardo fue una pesadilla para el conjunto argentino con el doblete que sentenció la historia. A los 53´, definió por el medio de área en un toque hacia el fondo de la red, mientras que cerca del cierre, al minuto 83, sacó un disparo de media distancia, cruzado, para un balón que ingresó bien pegado al palo.
Jonás Aguirre logró el tanto del honor, a dos minutos del tiempo cumplido, para un Rosario Central que necesita de un milagro en las dos fechas restantes: será local en Arroyito frente a Universidad Católica y Libertad, en el que tendrá que golear en al menos uno de los partidos y aguardar por otros resultados. Por su parte, Gremio ahora acecha al conjunto chileno para acompañar a los paraguayos a octavos.
