viernes, 15 de mayo de 2015
Tras la suspensión el equipos de Gallardo una hora para salir del campo del juego postales de una vergüenza deportiva
Dos horas y diez minutos después del momento de la agresión, y a una hora y diez minutos de decretada la suspensión del partido, los jugadores de River al fin consiguieron retirarse del campo de juego de la Bombonera hacia los vestuarios, protegidos por los escudos de los efectivos de seguridad ante los proyectiles que caían desde las tribunas.
El segundo tiempo debía comenzar apenas pasadas las 22, cuando arrojaron gas pimienta en la manga por donde salía River. Más de una hora después, el árbitro Darío Herrera anunció la suspensión. Y a pesar de que muchos hinchas se retiraron, otros cientos permanecieron en sus lugares y les arrojaron botellas y otros objetos a los jugadores que intentaban irse a los vestuarios.
Tampoco colaboraron lo jugadores de Boca, que podrían haber intercedido y acompañado a sus rivales al vestuario. Se quedaron a un costado, dentro del campo de juego, observando el espectáculo lamentable y escuchando los cánticos agresivos de sus hinchas.
Cuando al fin, encabezados por el entrenador Marcelo Gallardo, los jugadores de River pudieron encarar hacia el vestuario, los futbolistas locales los siguieron, no sin antes saludar a esos mismos hinchas.
